1. Presencia.
Cuando sales a pasear, el perro va completamente inmerso en el momento, lo disfruta al máximo.

Deja a un lado tus preocupaciones y experimenta cada momento con todos tus sentidos, verás lo fácil que será conectarte con el presente y los beneficios que te dará para relacionarte mejor con los demás.

2. No nos da por sentado.
Cada vez que regresamos a casa, nuestra mascota nos hace sentir como si llegara una celebridad, toda una fiesta llena de brincos y emoción.

¿Cómo cambiarían tus relaciones si les hicieras sentir a los demás lo importantes que son?

3. Empatía.
Seguramente te ha pasado que cuando estás en medio de un mal momento, pareciera que tu perro percibe tu emoción y te brinda el consuelo o la tranquilidad que necesitas.
No hace falta que crucen palabras, simplemente la compañía y una actitud de consideración y apoyo, obra milagros para romper con esa emoción de tristeza o enojo.

¿Cómo reaccionas tú cuando ves que alguien está en medio de un mal momento?

4. Mirada a los ojos.
La forma tierna, profunda en que nos miran, sin pretensiones, es como si intentarán leer nuestra mente o decirnos algo.
Nada es más importante para ellos cuando nos mira. Mantienen la firme intención de entendernos y conectarse con nosotros.

¿Qué tan entregado eres al escuchar a otros?

Fuente: AltoNivel